Los comienzos del monasterio se mencionan en 1530. Fue fundado por una viuda de Cres y ella construyó la iglesia de San Pedro. A lo largo de la historia se quemó tres veces con la iglesia, pero se renovó cada vez. Hoy en día, hay 10 hermanas y entretienen a los jóvenes, tienen un gran jardín, trabajan encajes y decoran velas.